Fortaleza de Blanquefort

La fortaleza de Blanquefort tuvo una importancia considerable como bastión del rey-duque Eduardo I. También juega un papel importante durante las Guerras de Religión. A partir del siglo XVII, el lugar fue abandonado por sus distintos dueños. Hoy es una espléndida ruina, realzada por la asociación GHABLE. El conjunto del castillo comprende un recinto de 1 m de desarrollo, con en el centro un gran torreón rectangular de 180 m por 18 m levantado sobre basamentos románicos y flanqueado por seis torres de medio punto. Estos edificios datan de finales del siglo XIII. Se hicieron modificaciones a finales del siglo XV, con la adición de cañoneras en las pequeñas torres redondas. Al norte, dos grandes torres de cañón se levantan custodiando el camino de acceso. El torreón central está atravesado por una hermosa puerta decorada.
Monumento Histórico Clasificado (lista de 1862).

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