La Iglesia de Magrigne, dedicada a Sainte Quitterie, fue construida a finales del siglo XII o principios del XIII por los templarios. Atractivo por su sencillez y bellas proporciones, tiene una nave abovedada con la cuna rota, rematada en una cabecera plana horadada por tres estrechos y esbeltos tramos. El hermoso portal de la fachada occidental está coronado por un elegante campanario de dos tramos. El edificio restaurado está catalogado como Monumento Histórico (1921).
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