El punto más alto de la Alta Gironda, la ladera de Montalon le ofrece un magnífico panorama sobre el valle del Dordoña. Aquí también pasa el paralelo 45 Norte, materializado por una estela visible en el sitio de los molinos de Montalon (Saint-André-de-Cubzac).
Desde la ladera, el camino entre los viñedos se une a un largo callejón de álamos que conduce al Château du Bouilh, en su entorno verde.
Después de atravesar un paisaje que alterna campos de maíz y viñedos, a lo largo de un camino sombreado, llegue al puerto de Plagne, un lugar tranquilo a orillas del Dordoña. El regreso al pueblo le hará descubrir sus joyas arquitectónicas, en particular el castillo de Robillard y su parque.
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